La higiene y el cuidado corporal son fundamentales para nuestra salud y bienestar generales. Los productos para el cuidado corporal de calidad le ayudarán a limpiar y cuidar la piel corporal y la protegerá frente a influencias externas agresivas, como el sol y los climas cálidos y fríos.

Pueden utilizarse también para calmar la piel alterada y tratar cualquier proceso que usted pudiera presentar. Una buena pauta de cuidado corporal contribuye a restaurar el equilibrio natural de la piel y mantenerla con un aspecto y una percepción sanos.

Para cuidar la piel de su cuerpo hay tres pasos básicos: limpiar, cuidar y proteger.

Limpieza

Una limpieza concienzuda es el primer paso de la pauta cutánea efectiva. La limpieza elimina el polvo, la grasa, el sudor y otros residuos para que la piel se perciba limpia y sana.

Cuidado

Los productos para el cuidado hidratan y reabastecen la piel. Utilice una crema o loción para hidratar el cuerpo después de la limpieza y trate cualquier problema cutáneo específico (como la sequedad). Los productos para el cuidado pueden también aplicarse en determinadas zonas corporales, como las manos y los pies, las axilas y el cuero cabelludo.

Protección

La protección solar es importante para aquellos días en los que su piel vaya a estar expuesta a los nocivos rayos UV, la causa principal del envejecimiento prematuro de la piel. La piel corporal no está expuesta a los rayos UV tan frecuentemente como la piel facial, de manera que aunque ésto no sea un paso diario esencial, debe incluirse en una pauta de cuidado cutáneo cuando sea apropiado.